Recordar los inicios de la lectura en mi vida me hace rebobinar mi vida y
transportarme hasta Todos Santos mi pueblo que me vio nacer donde mi mejor
maestra me leía condorito, recuerdo que alrededor de mis 4 años era la molestia
de mi madre para que me leyera las historietas de este personaje, me sentaba bajo un árbol de mandarina y
simulaba que podía leer relatando la historia de acuerdo a lo que
miraba en las imágenes, hasta que mi madre tenía tiempo y me leía la
historieta, había una frase que no se me
olvida, cuando vayas a la escuela tu aprenderás
a leer y me leerás la revista a mí, esa fue mi motivación y mi afán por
aprender a leer.
Cuando empecé a leer, recuerdo que no dejaba pasar un solo letrero, todo lo
que pillaba en calle lo leía, mi curiosidad por descifrar lo que decía me hacia
leer en voz alta, y claro que seguía siendo la molestia de mi madre porque en
los ratos que ella cocinaba yo andaba tras de ella leyendo en voz alta, como
disfrutaba leer ni mis perros se salvaban de que yo les contara la historia de
condorito.
En la primaria no recuerdo haber leído ningún libro, bueno mi primer libro de lecura obligatoria fue mis primeras luces de Gladyz Rivero, en secundaria el primer
libro que leí de manea completa fue El coronel no tiene quien le escriba de
Gabriel García Márquez.
Y claro que ya el gusto por la lectura se había disipado, con el transcurso
de los años en la escuela esas ganas por leer se terminaron, pero así hice mi
recorrido por los siguientes libros
Robinson Crusoe de Daniel Defoe
Raza de Bronce de Alcides Arguedas
La niña de sus Ojos de Antonio Díaz Villamil
Marianela de Benito Pérez Galdós
Volar Sobre el Pantano de Carlos Cuauhtémoc Sánchez
Un Grito Desesperado de Carlos Cuauhtémoc Sánchez
La Última Oportunidad de Carlos Cuauhtémoc Sánchez
El mundo de Sofía de Jostein Gaarder
El Código da Vinci de Dan Brown
Sin embargo, en todo este trayecto recuerdo que leí algunas obras, que no me gustaban y las dejaba a medias, o algunas como suele suceder me leía un capitulo que era para la exposición en clases y ya con eso fingía que me leí todo el libro, (que eso no lo sepa mi profesora de colegio que quede entre ustedes y yo). Así mismo hubieron libros tan interesantes que recuerdo que leí dos veces, el mundo de Sofía que me atrapo y disfrutaba los debates sobre filosofía con mi hermana que es maestra de filosofía y literatura, menudas conversaciones que teníamos, considero que otra de las personas que me incentivo a la lectura fue ella.
Cada lectura tuvo su impacto en cierta etapa de mi vida, leerme el Código Davinci
en semana santa, en tiempo record fue algo que produjo varias cuestiones de
rechazo por parte de algunas amistades, la lectura dio un cambio ya en la época
profesional puesto que mi pasión se despertó por la defensa y promoción de los
derechos humanos de personas con diversa orientación sexual e identidad de género.
La pasión por leer volvió aparecer, pero ya esta vez como parte de mí vida,
conocer historias de personas que relatan lo duro que es afrontar su sexualidad
en algunos espacio de la tierra, crea compromisos con la defensa y promoción de
los derechos humanos.
Recuerdo el primer informe que leí.
Derechos Humanos de lesbianas, gays, bisexuales y trans (LGBT) en Bolivia: Diagnostico y
antecedentes
Así empezaron a transitar muchos documentos más relacionados con la temática,
considero que la lectura sobre estos tópicos alimenta día a día mi compromiso con los
derechos humanos, para esto los medios de comunicación hacen un papel
fundamental, ya que estos materiales son compartidos a través de la web.
Me parece muy bonito tu inicio en el mundo de las letras. Es una historia muy dulce.
ResponderEliminarLo que más me gusta es que ahora busques leer sobre un tema que te apasiona, porque no te estás cerrando a un único tipo de lectura, sino que estás interesado en un contenido con vistas a un propósito. Ánimo, porque creo que tienes muchísimo por leer al respecto.